Fobia al ruido – Paloma López y Rocío Gavilán – Psicología Velázquez – conRderuido.com
- ¿Puede desarrollarse una fobia específica a un ruido? La respuesta es ‘SÍ’.
- La exposición a un ruido estresor en el domicilio puede propiciar un cambio en el estado de ánimo de la persona, que se vuelve más irritable y agresiva, y convierte la convivencia en algo totalmente devastador.
La fobia específica es el miedo intenso a un estímulo que provoca malestar con síntomas ansiosos como son las palpitaciones, dolores de cabeza, sudoración…
Fobia específica a un ruido
El ruido es un elemento constante en nuestras vidas, una realidad cotidiana y que a veces normalizamos.
Y para explicarlo adecuadamente, debemos decir que la fobia específica es entendida como el miedo intenso a un estímulo que provoca malestar incluyendo síntomas ansiosos como son las palpitaciones, dolores de cabeza, sudoración, etc.
Puede resultar raro pensar que se dé la fobia a un solo tipo de ruido, pero nada más lejos de la realidad, puede ser muy común. Por ejemplo, en personas que presencian y sufren un determinado ruido de manera constante en su domicilio puede generar un malestar e incomodidad ante esa situación.
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Un miedo constante al ruido
Si la situación de ruido no cesa se pueden agotar las habilidades y recursos personales para afrontar la situación y se genera un miedo permanente
Si la situación de ruido es constante y persiste en el tiempo sin cesar se pueden agotar las habilidades y recursos personales para afrontar la situación.
Entonces, se genera un miedo permanente a ese ruido en particular, sin que se produzcan síntomas físicos negativos.
Esto se debe a que la persona no puede soportar el insufrible ruido que vivencia en su hogar donde, supuestamente, debería estar confortable y descansada.
La ruptura del descanso provoca importantes síntomas ansiosos que no puede controlar, debido a que el ruido es constante e incesante, manteniendo a su vez comportamientos evitativos a este ruido, como por ejemplo salir de su hogar.
En el peor de los casos, la persona termina abandonado su propio domicilio y buscando otra vivienda. Es definitiva la existencia de una sintomatología ansiosa constante, no solo se da con la presencia de ese determinado ruido, simplemente con el hecho de pensar que tiene que volver a exponerse a él, sin poder controlarlo y sin poder minimizar los efectos en su salud.
Toda persona puede ser vulnerable a la aparición de una fobia específica
Vulnerabilidad a la fobia específica
Por su parte, la exposición a un ruido estresor en el domicilio puede propiciar un cambio en el estado de ánimo de la persona, volviéndose más irritable e incluso agresiva con terceros, convirtiendo la convivencia en algo totalmente devastador.
Toda persona puede ser vulnerable a la aparición de una fobia de este tipo, es decir, no sólo un determinado grupo de personas, las consideradas “más débiles”, tienden a padecerlo.
