Las smart cities o ciudades inteligentes son ya una realidad. No hablamos de las ciudades perfectas de las películas de ciencia ficción en las que los coches vuelan. Nos referimos a ciudades que aplican la tecnología para mejorar el uso de los recursos existentes y la calidad de vida de los ciudadanos.
Así se puso de manifiesto, a finales de 2016, en la sexta edición de Smart City Expo World Congress, el congreso sobre ciudades inteligentes celebrado en Barcelona en el que se presentaron casos reales y prácticos de cómo las tecnologías están transformando el día a día de los ciudadanos.
Los Ayuntamientos buscan soluciones tecnológicas, fáciles de implementar, para solucionar algunos de los problemas a los que se enfrentan a diario, como la contaminación acústica que producen el trafico y las actividades de ocio, y que provocan las principales quejas vecinales. Alicante, Girona o L’Escala (Girona) han puesto en marcha ya, con la ayuda de Urbiotica, soluciones tecnológicas propias de las ciudades inteligentes.
La realidad de un ‘mundo conectado’ y ‘el internet de las cosas’
En el prólogo del libro ‘Smart Cities, una visión para el ciudadano’, de Marieta del Rivero, el presidente y consejero delegado de Telefónica, José María Álvarez-Pallete ofrece datos de un mundo conectado y se refiere a lo que llamamos ‘el internet de las cosas’.
Las cifras aportadas son espectaculares: “7.300 millones de usuarios móviles; 3.700 millones de usuarios de banda ancha móvil; 3.600 millones de internautas y 2.300 millones de usuarios de redes sociales.”
“Es frecuente que, aparte de nuestros smartphones, muchos de nosotros tengamos una tableta, un libro electrónico, un monitor de actividad física, un navegador, una cámara de fotos o un dron. Todos ellos son dispositivos inteligentes y conectados. Y esto va a ser así no solo para los dispositivos personales: el contador de la luz o del agua, el sistema de domótica o de seguridad en nuestras casas, cualquier vehículo perteneciente a flotas comerciales o de transporte público, el riego automático en los jardines o los controles de una industria”, escribe Álvarez-Pallete.
Y añade: “Eso es lo que llamamos Internet de las Cosas y no hay que viajar al futuro para empezar a ver cómo se desarrollan a nuestro alrededor». Para Álvarez-Pallete, en las ciudades inteligentes será posible «monitorizar, automatizar, controlar y optimizar los procesos que facilitan el día a día, para alcanzar un grado de bienestar y de desarrollo como la humanidad no ha conocido antes”.
Tecnología contra el ruido en Alicante
Una de las ciudades españolas que más rápidamente ha asumido estas premisas es Alicante. La concejalía de Medio Ambiente del Ayuntamiento de la ciudad se ha marcado un reto, ‘compatibilizar el descanso de los vecinos con la actividad de los locales de ocio’.
Las actividades de ocio en el centro histórico y tradicional de Alicante, conocida como ‘tardeo’, son una atracción local y turística por la variedad de la oferta y por el buen clima de esta zona del levante español. Sin embargo, esta actividad que se realiza al aire libre ocasiona, en algunas ocasiones, molestias para los vecinos por el elevado ruido que produce.
Ante esta situación, el Ayuntamiento de Alicante ha puesto en marcha un sistema de medición continuo (las 24 horas del día) de los niveles de ruido, con el objetivo de conocer en qué zonas y momentos se superan los umbrales establecidos en la normativa. Urbiotica ha sido la compañía que ha realizado la primera medición seria y rigurosa de los decibelios (dB) que se generan en diferentes puntos del centro tradicional y del casco antiguo de Alicante.
Urbiotica ha implantado una red de sensores de ruido (en zonas de la ciudad donde se registran más denuncias por exceso de ruido) y pondrá a su disposición una web en el portal del Ayuntamiento desde donde los gestores, pero también los ciudadanos podrán acceder a la información obtenida por el sistema. Todo se ha realizado con el acuerdo entre representantes vecinales y técnicos municipales.
Las mediciones se llevarán a la ‘mesa del ruido’ donde se estudian las posibles acciones a adoptar para compatibilizar las actividades de ocio y restauración con el descanso de los vecinos.
Girona, soluciones al tráfico y al ocio nocturno
Una de las principales preocupaciones del Ayuntamiento de Girona es la contaminación acústica en algunas zonas de la ciudad por el tráfico y el ocio nocturno.
La corporación municipal, consciente del problema, necesitaba datos fiables y continuos del nivel de ruido para poder afrontar esta situación y así aplicar las medidas correctoras oportunas.
Urbiotica, junto al Ayuntamiento de Girona, preparó un proyecto de sonometría para medir el nivel de contaminación acústica de forma continua y en tiempo real, y lo desplegó en los cinco puntos más conflictivos de la ciudad.
Con los resultados obtenidos se obtuvo una ‘foto’ real de la situación que permitió definir planes de acción contra el ruido.
La solución ‘end to end’ (sistema de sensores, transmisión de datos y VisorAcustic) aportada por Urbiotica permite notificaciones en tiempo real en caso de que se alcancen determinados niveles de ruido y una intervención inmediata, especialmente en las zonas de ocio de Girona.
Además, la red de comunicación desplegada se puede beneficiar y complementar con otras soluciones existentes y permite que se implanten otras soluciones de gestión inteligente complementarias. Esto permite un ahorro de costes importante.
Los resultados obtenidos se pueden enumerar en los siguientes puntos:
- Información continua y en tiempo real del nivel de ruido ambiental
- Disminución de quejas, denuncias y de las gestiones administrativas
- Bienestar y satisfacción de los ciudadanos, menor estrés en un ambiente más saludable
- Optimización de recursos humanos
La satisfacción del Ayuntamiento de Girona ha quedado patente. “El coste de los sensores inalámbricos es menor. La red monitorizada nos permite disponer de datos de forma continua, de día y de noche. Así, hemos podido poner de relieve la importancia del problema del ruido en la ciudad y controlar su evolución (picos de tráfico y de actividad) y responder a las quejas de los ciudadanos, que también pueden acceder a la información a través del visor público”, explican desde el consistorio.
Aparcamiento inteligente en L’Escala
L’Escala es una población situada en una zona privilegiada de la Costa Brava, con gran atractivo para el turismo estacional. Durante los meses de calor la población se multiplica, y con ella las molestias a los ciudadanos y a los negocios céntricos en forma de congestiones de tráfico por los vehículos en busca de aparcamiento. Ni que decir tiene que la situación tampoco proporcionaba una buena imagen de la localidad turística.
La Administración Local abordó el asunto y puso en marcha el proyecto de Urbiotica cuyo objetivo principal era reducir la congestión del tráfico provocada por dichos vehículos.
Se instalaron 7 paneles informativos en las entradas y periferia del núcleo urbano con información para los conductores sobre la ocupación de los 5 aparcamientos más importantes del centro urbano. Con dicha información, los vehículos son guiados en función de la disponibilidad real de plazas de aparcamiento, lo que permite una reducción de hasta un 30% del tiempo de circulación.
La información sobre las plazas libres y ocupadas se realiza mediante la instalación de sensores U-Spot en las plazas de estacionamiento y sensores U-Flows en las entradas y salidas de los 5 aparcamientos más importantes del centro de L’Escala. Dicha información aparece en tiempo real a los 7 paneles informativos.
Aparcar en L’Escala ahora es una operación que los vehículos realizan de forma más ágil y rápida. Gracias a la solución implantada por Urbiotica se ha reducido un 30% la congestión de vehículos y los niveles de contaminación. Esto ha influido en la satisfacción de los ciudadanos (mejora de su calidad de vida) y de los comerciantes locales (que han visto estimulado su negocio). La localidad, además, ha ganado en su imagen turística.