El otorrino, ‘amigo’ de tus oídos también en verano
ENTREVISTA | Dr. Pablo de Lucas, Jefe de Servicio de Otorrinolaringología del Hospital Quirónsalud Sur
«Cuanto más tiempo en el agua y cuanto más sucia más riesgo para el oido»
El otorrino es, sin duda, uno de los especialistas médicos que debe cobrar protagonismo para el cuidado de los oídos durante el verano.
En esta interesante entrevista, el Dr. Pablo de Lucas nos ofrece, en un lenguaje claro y preciso, toda la información y consejos que debes tener en cuenta en esta época del año para una correcta salud de tus oídos.
El Dr. Pablo de Lucas es Licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad Autónoma de Madrid. Realizó la especialidad de Otorrinolaringología, vía MIR, en el Hospital Clínico Universitario San Carlos y en el Hospital Universitario La Paz de Madrid.
El otorrinolaringólogo es, sin duda, uno de los especialistas médicos que debe cobrar protagonismo para el cuidado de los oídos durante el verano
Comenzó su actividad asistencial en el Hospital de la Zarzuela de Madrid y en 2003 fue nombrado Jefe de Servicio de Otorrinolaringología en el Hospital Quirónsalud Sur.
Ha sido jefe de Servicio del Hospital Infanta Elena de Madrid y también realiza su trabajo asistencial en el Hospital Universitario Quirónsalud Madrid.
Su actividad se centra en la Otorrinolaringología en general y, de forma especial, en la patología de oído, nasosinusal y pediátrica, donde cuenta con una amplia experiencia.
Sólo deben proteger sus oídos de la entrada de agua las personas con perforaciones timpánicas, las que hayan sufrido ciertas operaciones en los oídos, y aquellas otras con determinados problemas en su oído externo.
R’. Doctor, ¿existen leyendas urbanas en cuanto al cuidado del oído? ¿Qué dice el otorrino?
PdL. Sí. Yo destacaría dos. La primera es pensar que no debe entrar agua en los oídos cuando sufres o has sufrido cualquier tipo de problema. Esto no es así, ya que sólo deben proteger sus oídos de la entrada de agua las personas con perforaciones timpánicas, las que hayan sufrido ciertas operaciones en los oídos, y aquellas otras con determinados problemas en su oído externo.
La segunda es pensar que la higiene correcta de los oídos es la limpieza con los bastoncillos.
Hay que insistir en que el uso de bastoncillos no está recomendado; el cerumen protege el oído y sólo hay que quitar el exceso de cera. Además, en el intento de limpiar la cera es frecuente empujarla hacia dentro originando tapones, e incluso se pueden producir traumatismos en el conducto y la membrana timpánica.
Hay que insistir en que el uso de bastoncillos no está recomendado; el cerumen protege el oído y sólo hay que quitar el exceso de cera
R’. ¿cuáles son los principales riesgos para el oído en verano?
PdL. El principal riesgo es la exposición del oído a ambientes húmedos y calurosos, y la entrada del agua en el oído que es lo que se produce con los baños en verano en las playas y piscinas….
También el someter a los oídos a cambios bruscos de presión con los viajes en avión o la práctica del submarinismo.
Y por último, no debemos olvidar la exposición a ruidos intensos en la asistencia a fiestas, conciertos, discotecas, etc. Son actividades que se practican más frecuentemente en verano.
El principal riesgo es la exposición del oído a ambientes húmedos y calurosos, y la entrada del agua en el oído que es lo que se produce con los baños en verano en las playas y piscinas….
R’. ¿Qué patologías pueden aparecer? ¿Tratamientos?
PdL. Con relación a la exposición al agua, la patología principal es la otitis externa, que habitualmente se trata con gotas tópicas de antibiótico que pueden acompañarse de antiinflamatorios. Su pronóstico es bueno y se cura sin secuelas.
Además, las personas con tendencia a hacer cera en los oídos pueden tener tapones al hincharse la cera con el agua de los baños, y el tratamiento es la limpieza de los oídos por un profesional.
También tenemos los barotraumas que son aquellas lesiones que se pueden producir en los oídos por problemas para compensar los cambios de presión en el oído, por ejemplo, en las maniobras de despegue y aterrizaje de los aviones o en la práctica de submarinismo. Su tratamiento depende de su gravedad, aunque en general podríamos decir que se tratan con antiinflamatorios.
Y en el caso de los traumatismos acústicos el problema es que sólo son relativamente reversibles en la fase aguda, y una vez producidos no tienen tratamiento eficaz. El tratamiento es fundamentalmente preventivo.
Existen riesgos al someter a los oídos a cambios bruscos de presión, como por ejemplo con los viajes en avión o la práctica del submarinismo.
Los barotraumas son lesiones por problemas para compensar los cambios de presión en el oído, durante el despegue y aterrizaje de los aviones o en el submarinismo
R’. ¿Existe un perfil de riesgo en cuanto a enfermedades del oído provocadas por el calor, el agua, el ruido?
PdL. Quien más tiempo pasa en el agua más riesgo, y cuanto más sucia este el agua más peligro. No es lo mismo bañarse en el agua de una piscina, que en un pantano.
Además, hay personas que tienen un riego individual añadido como las que frecuentemente tienen tapones, las que tienen enfermedades en la piel, sobre todo enfermedades que producir picores en los oídos, como los eccemas, que hacen que las personas se rasquen e incluso se produzcan heridas en el oído, o las personas con alteraciones en la forma de sus conductos auditivos. También las personas con perforaciones timpánicas o aquellas que usan audífonos tienen más probabilidades de tener otitis externas.
Con el ruido pasa lo mismo: cuanto más fuerte sea el ruido peor, y cuanto más tiempo estés expuesto al ruido más daño puedes causar al oído interno. Las personas con ciertos problemas de oído interno como las que sufren zumbidos o tienen pérdidas auditivas deberían tener, si cabe, más cuidado con los ruidos.
Las personas con problemas de oído interno como zumbidos o pérdidas auditivas deberían tener, si cabe, más cuidado con los ruidos
R’. ¿Cómo protegemos el oído de las altas temperaturas, si es que le afectan ¿Y del agua?
PdL. El calor, la humedad, al exposición al agua, la alteración de la piel de conducto auditivo son factores de riesgo para sufrir otitis externa. Esta combinación es la que se produce en los baños en verano.
Las medidas consisten en la limpieza de los oídos por un profesional antes del verano en las personas que tienen tendencia a acumular cera, no tocarse ni limpiarlos metiéndose el dedo ni objetos, ni para rascarse, ni para intentar limpiar el oído, ni para secarlos.
El oído se seca después del baño suavemente con la toalla por fuera. No hay que intentar secarlo en profundidad porque nos podemos hacer heridas en el conducto y facilitar las infecciones.
Si la persona es muy propensa a coger infecciones con el agua se podrá consultar con el especialista la conveniencia de usar tapones, bandas o gorros para evitar la entrada del agua o tratamientos tópicos para después del baño. También, deberíamos evitar los baños en aguas muy sucias o contaminadas.
Dr. Pablo de Lucas, Jefe del Servicio de Otorrinolaringología del Hospital Quirónsalud Sur
R’. El enemigo invisible… el ruido. Consejos para protegernos de algo muy común en verano, los conciertos con música continuada y a un elevado volumen.
PdL. Invisible, nunca mejor dicho: la exposición al ruido puede producir un daño lento y progresivo, que puede pasar desapercibido para las personas en las etapas iniciales y sólo darnos cuenta cuando nos repercute en la audición o aparecen acúfenos (ruidos en los oídos) y entonces ya es tarde porque el daño está hecho y es irreversible.
Debemos evitar los entornos ruidosos: en los conciertos o fiestas alejarnos de las fuentes sonoras, y protegernos los oídos con tapones atenuadores.
Debemos evitar entornos ruidosos: en conciertos alejarnos de las fuentes sonoras, y proteger los oídos con tapones atenuadores
R’. ¿Qué debemos hacer para tener una correcta salud auditiva?
PdL. Evitar los ambientes ruidosos y evitar la toma de sustancias tóxicas para los oídos. No manipularse el oído. No demorar la consulta al médico cuando tengamos síntomas en los oídos.
Evitar los vuelos en avión y el submarinismo cuando tengamos mucha congestión nasal.
Las personas expuestas al ruido deberán hacer sus revisiones periódicas, aunque crean que sus oídos están bien. También deberían hacerse un control las personas que van a practicar submarinismo.
R’. ¿Cuándo debemos preocuparnos y acudir a la consulta del otorrino?
PdL. La persona que tiene dolor de oídos está claro que acudirá al médico, pero a veces parece que si una cosa no duele no es grave, y se demoran las consultas por pérdidas auditivas, taponamiento de oídos, supuraciones del oído, aparición de ruidos en los oídos, etc.
Es importante que acudan pronto al Otorrinolaringólogo porque a veces, el tratamiento de la enfermedad depende de la rapidez con la que se pronostique.
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R’. Además de los avances de su especialidad para las personas ‘que no oyen bien’, hay algo que el resto de las personas podamos hacer en la relación con estas personas. Quizás empezar por no llamarles ‘sordos’?
PdL. Sí, son personas que tienen una limitación y que pueden sentirse incomunicadas y aisladas socialmente. Hay que hablarles pronunciando bien, lentamente, y sin chillar. Mirándolos a la cara para que puedan ver nuestros labios y nuestros gestos. Evitando las conversaciones a distancia y los entornos ruidosos.
Y si tenemos confianza instarles a que acudan a un Otorrinolaringólogo para que valoren su problema, porque a veces se puede curar la pérdida auditiva, y otras habrá que recurrir un tratamiento paliativo como la adaptación audioprotésica.
Todavía hay pacientes que no quieren adaptarse audífonos por el miedo al qué dirán ignorando que lo que realmente aísla es no poder oír bien, y hay que insistirles en que se pongan audífonos.
Debemos evitar los entornos ruidosos: en los conciertos o fiestas alejarnos de las fuentes sonoras, y protegernos los oídos con tapones atenuadores.
Hay pacientes que no quieren adaptarse audífonos por el miedo al qué dirán, pero lo que realmente aísla es no poder oír bien
R’. ¿Verán las personas que no ven y las personas que no oyen? ¿Que piensa el otorrrino?
PdL. En el caso de las personas que no oyen me atrevo a decir que ‘casi’. El gran avance fue la aparición de los implantes cocleares. Son un tipo prótesis auditiva que se colocan mediante una intervención quirúrgica y sustituyen la función del oído interno. Se pueden beneficiar personas con sorderas profundas que no se beneficiaban con los audífonos convencionales.
Además, con las prótesis auditivas implantables y los audífonos actuales se cubren situaciones que no podrían solucionarse con los antiguos audífonos. Con todos estos dispositivos se puede ofrecer un tratamiento paliativo a muchos tipos de sordera.
Lo que está todavía por llegar son las terapias que ayuden a curar los daños del oído interno o evitar la aparición de ciertos tipos de sordera. Por decirlo de alguna manera: hacemos que los sordos oigan con distintos dispositivos electrónicos pero no somos capaces de curar la sordera.
