De los efectos de la contaminación acústica en adultos, ya hemos hablado en los anteriores post, pero ¿qué pasa con los niños?, ¿afecta el ruido a los niños de igual manera que a los adultos? La respuesta es SÍ. La exposición prolongada de los niños al ruido tiene multitud de efectos.
Al igual que en los adultos, donde, por ejemplo, un día cualquiera en nuestro lugar de trabajo, o en una reunión social con nuestro grupo de amigos, el ruido puede ocasionar molestias a la hora de mantener una conversación e incluso comprenderla, a los niños en su colegio o en su entorno social, les ocurre lo mismo.
La contaminación acústica está directamente relacionada con el aumento de errores y la disminución de la motivación
Si estas interrupciones ocurren de manera ocasional, no habitual ni continua, pueden ser entendidas por las circunstancias aunque no por ello menos molestas.
Si esto ocurre de manera prolongada, como ya hemos hablado anteriormente, dichas interrupciones terminaran afectando al comportamiento del niño, así como a su capacidad de concentración, fatiga, incertidumbre, irritación, etc.
Existen estudios realizados en colegios situados cerca de un aeropuerto por ejemplo y que demuestran que el ruido puede interferir en el proceso educativo.
Esto ocurre debido a que la contaminación acústica está directamente relacionada con el aumento de errores y la disminución de la motivación.
Además, la atención lectora, la resolución de problemas y la memoria, pueden quedar fuertemente afectadas por el ruido. Además de estas afectaciones, se ven incluidas las habilidades sociales o la comunicación oral entre iguales.
Ruido de coches y aviones
Uno de los estudios más destacados fue el PROYECTO RANCH, que estudió la relación entre la exposición al ruido del tráfico y aviones y sus efectos cognitivos y de salud.
La exposición crónica a ruido de aviones se asocia con un significativo deterioro de la comprensión lectora
El estudio se realizó en Reino Unido, España y Holanda, y los resultados demuestran que la exposición crónica al ruido de aviones está directamente relacionada con un deterioro significativo de la comprensión lectora y también con la memoria.
En los efectos relacionados con la salud, tanto el ruido del tráfico como el de los aviones, se asocia directamente con las respuestas crecientes de molestia en niños.
Algunos de los resultados del estudio fueron:
- La exposición crónica a ruido de aviones se asoció con un significativo deterioro de la comprensión lectora.
- Se asoció linealmente la exposición crónica al ruido de aviones, con un deterioro significativo del reconocimiento, pero no con el recuerdo de información ni el recuerdo conceptual. Sin embargo, la exposición al ruido del tráfico no supuso efectos sobre la comprensión lectora, el reconocimiento, la memoria de trabajo ni la atención sostenida.
- En cuanto a los efectos sobre la salud, ambas exposiciones, tanto al ruido de aviones como al de tráfico, se asoció de manera importante con las molestias en los niños.
Los resultados, presentan la existencia de una asociación lineal exposición – efecto entre la exposición al ruido de aviones y el deterioro de la comprensión lectora y la memoria de reconocimiento en niños y entre la exposición del ruido al tráfico y un incremento de la memoria episódica.
Exposición al ruido durante el embarazo
La exposición al ruido excesivo durante el embarazo puede provocar en los niños pérdida auditiva o retrasos en el crecimiento intrauterino, además de perturbar su desarrollo y crecimiento normal
De la misma manera que afecta en adultos y niños, es muy interesante saber que el ruido tiene efectos a su vez en fetos y en recién nacidos.
En los fetos, esto se explica debido a que la coclea y las terminaciones periféricas sensoriales son órganos que completan su desarrollo en la semana 24 de gestación.
El umbral de audición entre las semanas 24 – 29 de gestación es aproximadamente 40dB y decrece a 13.5dB en la semana 42, debido a la maduración y el desarrollo normal del sentido del oído.
Estudios realizados documentan una pérdida de audición en niños cuyas madres estuvieron expuestas a altos niveles de ruido en el embarazo. Exposiciones de 65 a 95 dB durante 8 horas al día incrementan en un factor de 3 el riesgo de que exista dicha pérdida de audición.
Por lo tanto, es importante conocer que la exposición al ruido excesivo durante el embarazo puede tener resultados en los niños tales como, pérdida auditiva o retrasos en el crecimiento intrauterino y prematuridad, además de perturbar su desarrollo y crecimiento normal.