Crecen las denuncias por ruido – Rocío Gavilán y Paloma López – Psicología Velázquez
- El último suceso ha tenido lugar en Sevilla, concretamente en Alcalá de Guadaira, donde un vecino ha decidido denunciar el ruido de un autobús que pasa por su calle aproximadamente 23.000 veces al año.
- Una de las calles por donde pasa el autobús tiene una pendiente de unos 11 metros en sentido ascendente y el motor del vehículo genera un ruido y unas vibraciones muy por encima de lo permitido que perturba su descanso y el del resto de los vecinos.
El autobús de la tortura por ruido
Si hace unos años nos dicen que la lucha contra el ruido va a experimentar un crecimiento como el que ha vivido, no nos lo creemos.
Hace unos meses, se disparó el alquiler de viviendas turísticas y los ciudadanos afectados no dudaron en emprender una lucha contra los vecinos que llevaban a cabo estas prácticas. Pues bien, comienza la lucha contra el ruido de los transportes públicos que superan el nivel de decibelios permitidos.
Un vecino ha decidido denunciar el ruido de un autobús que pasa por su calle aproximadamente 23.000 veces al año
El último suceso ha tenido lugar en Sevilla, concretamente en Alcalá de Guadaira, donde un vecino ha decidido denunciar el ruido de un autobús que pasa por su calle aproximadamente 23.000 veces al año.
Resulta que el recorrido es algo complejo, aunque los autobuses lo realizan desde hace más de 10 años.
El ciudadano David Rodríguez explica en un escrito dirigido a la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, que una de las calles por donde pasa el autobús tiene una pendiente de unos 11 metros en sentido ascendente, y que el motor del vehículo genera un ruido y unas vibraciones muy por encima de lo permitido que perturba su descanso y el del resto de los vecinos.
Derecho a reclamar un entorno saludable y sin ruido
David explica que ese autobús en concreto realiza una ruta específica, y por ello, un numero de viajes elevado, lo que supone que a lo largo de todo el día y toda la noche el ruido esté presente en sus vidas. Refiere que, en una hora, dicho vehículo realiza ese tramo unas cuatro o cinco veces, lo que supone un total de aproximadamente 73 veces al día, de lunes a viernes, y entre 35 y 40 los fines de semana y festivos.
Una de las calles por donde pasa tiene una pendiente de once metros en sentido ascendente y el motor genera un ruido y vibraciones muy por encima de lo permitido
David, no ha sido el único vecino que ha presentado quejas, y gracias a esto el Ayuntamiento realizó un estudio de lo que ocurría, en el que se concluyó que, efectivamente, se superaban los niveles de contaminación acústica establecidos por la Ley en lo trayectos de todo el día.
Estamos en nuestro derecho de reclamar un sueño sano y un entorno en el que no tengamos porque estar todo el día escuchando ruidos que superen los niveles permitidos.
Puede ser que sintamos la vergüenza o la sensación de que denunciar, o presentar escritos o quejas a los Ayuntamientos o distintos responsables, no sirva para nada, pero cada día leemos más noticias de vecinos que consiguen un entorno más saludable con menos ruido. Hay que luchas por nuestros derechos.