Estereotipos, no todo lo que brilla es oro – Por Laura Quiun
Ya dice el saber popular que de política, fútbol y religión no se habla en la mesa. ¿Alguna vez te has preguntado por qué? Son tres temas que inflaman la pasión y que están sumamente ligados con la esencia de quién somos en realidad.
Nos debatimos por ellos a capa y espada, asumiendo que nuestra realidad es única, defendiéndola como única verdad. ¿Necesariamente es así?
Otro ruido, los estereotipos
En esta ocasión, quisiera hablar de los estereotipos, otro ruido que en ocasiones también interfiere en la comunicación. No porque sean buenos o malos, sino porque surgen de una creencia compartida en base a una realidad que fue, pero que no necesariamente tiene que ser así.
Esta simplificación impide que apreciemos la totalidad de los matices. Esta reflexión es una apuesta por ir más allá de eso en apariencia evidente y apreciar aquello que está detrás de cada estereotipo.
Un estereotipo dentro del estereotipo es pensar que todos ellos incluyen un componente de prejuicio
Otro estereotipo del estereotipo puede ser el suponer que siempre son malos. Tampoco es así.
Como el hecho de que todos los peruanos sean bajitos, ni que por ser peruano te guste el ceviche, ni el que Lima por ser la capital de un país andino se encuentre en el altiplano.
Pueden ser risibles los ejemplos, pero son todos y cada uno de ellos reales. Es totalmente inocuo pensar que todos los peruanos somos bajitos, porque no es así, formo parte del grupo que rompe esta regla. A no todos los peruanos les gusta el ceviche y Lima es una ciudad costera.
Ninguno de ellos hace daño a nadie, simplemente, describe generalizaciones, simplificaciones, creencias sobre una realidad que se construye en base a lo que somos y lo que el otro es.
Fotos: DPNB
Sociedad inclusivas, patriarcales, igualdad…
Fijarnos en estereotipos, puede resultar útil, porque gracias a ellos podemos tomar contacto sobre la idea que hay en base a determinado tipo de cosas, retarla y ampliar criterio.
También, el reflexionar sobre el número de veces que tendemos a generalizar o simplificar. A darnos cuenta de por qué sobredimensionamos una realidad y al hacerlo dejamos de ver otras cosas iguales o peores a nuestro alrededor, anulando nuestra visión de ello.
Tanto a nivel de nuestro entorno más cercano, como la relación que tiene nuestro grupo cercano con el resto de la sociedad y sociedades a nuestro alrededor. A día de hoy, hablamos de sociedades más inclusivas, hablamos de sociedades patriarcales, hablamos de igualdad. ¿Podrías explicar cada uno de estos conceptos?
Quisiera preguntarte, ¿eres consciente que del mismo modo que unos caen, unos nuevos surgen?
Quizá porque sean las personas que sigo, las personas que comparten información conmigo en la red, aprecio que estoy delante de un momento en el que muchos de esos antiguos estereotipos caen atrás. Quisiera preguntarte, ¿eres consciente que del mismo modo que unos caen, unos nuevos surgen?
Posiblemente tengas una mentalidad abierta y con ello una apertura mayor a todos los cambios que suceden por delante, quisiera preguntarte, ¿te adscribes a todos estos nuevos movimientos?
Como decía Mark Twain: (*) “Toda generalización es falsa, incluso esta”.
Estereotipos y ruido
Quisiera que lo tengas en cuenta. La música está compuesta de distintas notas, se toca en diversas claves, se interpreta de distinta manera. El ruido aparece cuando de pronto algo lo colma todo y te termina ensordeciendo.
Más allá de lo inocuo, que puedan ser estas simplificaciones que usamos muchas veces sin darnos cuenta. Conviene tener conciencia que son eso, generalizaciones.
El ruido aparece cuando de pronto algo lo colma todo y te termina ensordeciendo
Que todo que en apariencia es una verdad, en realidad solo se trata de una verdad en parte.
Que posiblemente si conociéramos todo el universo, podrías apreciar que las cosas no siempre son así.
Tomemos en cuenta las palabras con las que Henri Tafjel finaliza el artículo en el cual me he apoyado para poder escribir este, hablando sobre el tiempo posterior a la segunda guerra, los tiempos que allí ocurrieron y la diversidad de la sociedad que se nos plantea por delante.
Fotos: DPNB
Posverdad, noticias falsas…
A día de hoy si bien no existen campos de exterminio, sin embargo, nos encontramos delante de pensamientos extremos, que apelan a cuestiones que años atrás llevaron a ese triste final. Más allá de las particulares estructurales de cada sociedad, más allá de la mayor o menor formación, del grado de profundidad que apoyan esas ideas.
Somos los únicos capaces de esforzarnos y contrastar lo que nos dicen, porque no siempre todo lo que brilla es oro
Es importante recordar, que a día de hoy no es la televisión aquella que nos impone los estereotipos, es cada uno quien interactúa agrandando o no determinado tipo de hechos.
Estamos en un momento en el cual posiblemente hablemos de posverdad, de noticias falsas.
Lo cierto es que también en estos tiempos, somos nosotros los únicos capaces de poder esforzarnos un poquito y contrastar aquello que nos dicen, porque como empezaba diciendo, no siempre todo lo que brilla es oro.
También puedes leer los artículos de la Doctora en Psicología, Laura Quiun, en jupsin.com
Referencias
Tafjel, H. (1982). Social Psychology of Intergroup relations. Annual Review Psychology, 33, 1-39.
(*) Esta frase y algunas variaciones de la misma se atribuye también a otros autores.
