¡El Defensor del Pueblo es contundente frente al grave problema del ruido en verano! Esta institución recibe, año tras año, cientos de quejas, sobre todo en verano, por el ruido y las molestias que generan las actividades aire libre.
Es tiempo de festivales de música, espectáculos diversos y fiestas patronales que se celebran, junto a núcleos urbanos, en pueblos, barrios y ciudades.
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¡El Defensor del Pueblo es contundente frente al grave problema del ruido!
A través de las quejas que tramita, el Defensor recuerda a los ayuntamientos que la Ley 37/2003, de 17 de noviembre, del Ruido atribuye a las corporaciones locales la labor de prevención, vigilancia y reducción de la contaminación acústica en su territorio.
Y que deben buscar el equilibrio entre las actividades –económicas, festivas, culturales o lúdicas– y los derechos de los vecinos.
Lugares inhabitables
Según la institución, solo una regulación adecuada, y la supervisión efectiva del cumplimiento de las condiciones en las que estas actividades deben realizarse, evitará que los centros urbanos o sus inmediaciones se conviertan en lugares inhabitables, por la imposibilidad de que los vecinos desarrollen una vida normal, conforme a los derechos que la Constitución les garantiza.
«No se trata de imposibilitar el desarrollo de actividades ligadas a eventos lúdicos o culturales. Lo que se pretende es que sean compatibles con el respeto al derecho al descanso que asiste a los residentes en áreas cercanas a los lugares donde tengan lugar acontecimientos de este tipo», señala el Defensor del Pueblo, Ángel Gabilondo.
Limitadores de sonido y horarios razonables
El Defensor del Pueblo recomienda, entre otras medidas, que se exija a los organizadores la utilización de limitadores de sonido en altavoces y megafonía, además de determinar horarios razonables y reducidos cuando se celebren actos y espectáculos en la vía pública que utilicen música amplificada.
La institución reclama, además, a los ayuntamientos que realicen las mediciones acústicas y los controles necesarios y que, ante emisiones por encima de los valores máximos establecidos, adopten las medidas necesarias para lograr que se acomoden a la normativa, llegando a aplicar, en su caso, sanciones que deben resultar disuasorias.
Asimismo, desde el Defensor del Pueblo se recuerda que los ciudadanos pueden y deben exigir a los ayuntamientos que realicen las mediciones acústicas cuando sientan que se están viendo afectados por alguna actividad molesta, y les insta a quejarse en esta institución si consideran que las administraciones no están protegiendo adecuadamente sus derechos.
¿Por qué las quejas por ruido caen en saco roto?
¿Por qué suspendemos en la gestión de la contaminación acústica?
Puy Sánchez
01/08/2023 at 16:16
Desde que han puesto un pipicán enfrente de donde vivo ya se ha terminado el poder vivir tranquila. Ladridos de toda clase de perros y a todas las horas del día y de la noche no dejan vivir. No hay derecho que no podamos ni siquiera abrir las ventanas para refrescar los pisos porque no puedes ni dormir.Si llamas a los ayuntamientos no te hacen ni caso y te remiten a la Policía Municipal. Como si no tuvieran problemas más urgentes que resolver. Señores, que cuando tengo un catarro no voy a urgencias!!!
Juan
01/08/2023 at 12:07
No creo mucho en las instituciones en la lucha contra el ruido, son muy permisivas, a pesar de la importancia que tiene para la salud física y psíquica de las personas. ¿Porqué son tan permisivos con las cotorras, hacen un ruido insoportable,… pero ahí estarían los animalistas oponiéndose a medidas correctoras en este sentido… para ellos es más importante el desarrollo y tranquilidad de esas aves invasoras que la de las personas. ¿Porqué las autoridades no ponen un freno o una legislación para que el ruido de las terrazas de bares y restaurantes no produzcan malestar, incomodidad y fuente de gran insatisfacción entre los vecinos afectados por la contaminación acústica que provocan esas terrazas? Antiguamente se decía que hablar fuerte era un signo de mala educación por el malestar que pueda proporcionar a terceros, ¿Porqué las instituciones educativas no propagan las enseñanzas de respeto a los demás en ese sentido y no se le inculca a la gente en general esos valores? Actualmente las instituciones no fomentan la importancia y gravedad de la contaminación acústica y aunque hay otro tipo de sensibilidades a las que dan gran valor, no precisamente a las sensibilidades acústicas.