Elena Rubio, ‘la psicóloga en tus zapatos
Hasta ahora hemos trabajado en la línea del ruido ambiental que puede dañar la sociedad, a los trabajadores, a los vecinos, etc. Pero, ¿y si ponemos el foco en los más pequeños?
En conRderuido.com pensamos que, como en otros ámbitos de la vida (violencia, medioambiente, etc.), la educación, sensibilización y concienciación frente al ruido son primordiales, aunque no únicas.
Pensemos en cuánto ruido se genera en un colegio, y cómo afecta esto a la concentración, por un lado, a la convivencia, por otro…
Las medidas sancionadoras, por desgracia, siempre tendrán que existir, pero desde aquí queremos lanzar un grito (no sonoro) contra el ruido en las aulas.
Pensemos en cuánto ruido se genera en un colegio, y cómo afecta esto a la concentración, por un lado, a la convivencia, por otro… Y valoremos cómo puede influir que, si en un entorno en el que los chavales pasan tantas horas al día, se respire un ambiente sin ruidos y éste sea apreciado y reforzado.
Un reto para los colegios, protocolo contra el ruido
Desde conRderuido.com queremos proponer un reto a los colegios. El propio colegio o las AMPAS pueden proponer lanzar un PROTOCOLO CONTRA EL RUIDO, con la colaboración de los diferentes agentes.
¿Por qué un protocolo contra el ruido en los colegios?
- Ayudará a convivir de una manera más saludable en el entorno del propio trabajo
- Los niños (y adultos) se concienciarán y educarán en el respeto a sí mismos, y por consiguiente, al otro.
- Esto, a largo plazo, ayuda a que estas personas quieran vivir, durante su vida adulta, disfruntado del silencio y rechazando una insana vida con ruidos. Cuando se trabaja desde la infancia, es más fácil sensibilizar y concienciar.
Obviamente, estas campañas programas de educación y concienciación poco funcionarán si en casa se transmiten otros valores contrarios.
¿Cómo elaborar nuestro protocolo contra el ruido?
A continuación vamos a proponer pasos o pautas a seguir para poder elaborar el propio PROTOCOLO CONTRA EL RUIDO en tu colegio. En tu mano estará el convencer al propio colegio de su importancia y de cómo adaptar dicho protocolo a la circunstancia concreta de cada centro:
- Buscar unos objetivos generales y específicos: ¿qué pretendemos conseguir?
- Crear una comisión con integrantes de diferentes sectores (profesores, celadores, administrativos, personal de gestión y, por supuesto, alumnos de diferentes edades).
- Analizar la situación actual, valorar los puntos críticos del centro, las horas de mayor nivel de ruido, las actividades más ruidosas, etc. (Se podrían incluso medir los decibelios con equipos específicos).
Aquellos grupos más ruidosos deberán trabajar en equipo para buscar medidas de mejora y llevarlas a cabo.
- Una vez analizada la situación, la comisión podrá plantear tanto actuaciones preventivas como correctivas, así como pensar en actuaciones que, en la medida de lo posible, consigan eliminar las fuentes de ruido que sea posible.
- Sensibilización: se puede valorar realizar cartelería por parte de los alumnos, dar charlas en las aulas sobre las medidas a adoptar (que algunas, o muchas, implicarán a los propios alumnos), códigos de buenas prácticas, etc.
- Comprobaciones: Se pueden realizar “inspecciones” para comprobar posibles cambios.
- Recompensas: Llevar a cabo algún sistema de recompensas para aquellas aulas o grupos menos ruidosos.
- Consecuencias: Aquellos grupos más ruidosos deberán trabajar en equipo para buscar medidas de mejora y llevarlas a cabo.
- Buscar un nombre atractivo para el proyecto, que llame la atención de pequeños y mayores.
Manos a la obra
Estos son algunos puntos que proponemos y que pueden servir para llevar a cabo vuestro protocolo contra el ruido en el colegio donde trabajas o en el de tus hijos. Además de reducir el ruido diario y concienciar a todos de la importancia del silencio, también puede servir para:
- Fomentar el trabajo en equipo.
- Hacer trabajar a personas de diferentes áreas y edades, con lo que esto enriquece al proyecto y a las propias personas.
- Fomentar y mejorar la autoestima de los niños que se sienten parte de un proyecto especial y que lo que ellos hacen es positivo e importante.
- Fomentar el espíritu del esfuerzo y del trabajo.
Parece que son todo ventajas… ¿no te animas a proponerlo en tu colegio?